Celebrar el Día de los Abuelos a distancia es posible, no es lo mismo, pero sí es posible lograr que sea una tarde para recordar. Cuando los abuelos viven en otra ciudad o las agendas de unos u otros no permiten que este año podamos pasar una fecha tan señalada en el calendario todos juntos, no nos queda otra que echar mano de todo nuestro ingenio para acortar distancias y hacer llegar nuestro amor a los mayores y más sabios de la familia.
Categoría Abuelos
Aunque pasen los años, seremos siempre alguien muy importante para nuestras abuelas. No nos olvidemos de que las abuelas no son solo aquellas que están para cuidar a nuestros hijos cuando tengamos que trabajar o hacer un viaje, o los que ayudan emocionalmente e incluso económicamente a las familias. Las abuelas no son las segundas madres… ¡son abuelas!
Mi infancia y, sobre todo, mis vacaciones de verano no hubiesen sido igual sin la figura de mis abuelos maternos. Y es que la entrega, el cariño y la dedicación que mi abuela Antonia y mi abuelo Emiliano me brindaron cuando era pequeña permanece aún hoy en mí. Son muchas las ocasiones en las que me gustaría retroceder en el tiempo para volver a hacer rosquillas con mi abuela o dar un paseo en el burro de mi abuelo.
Celebrar el Día de los Abuelos a distancia es posible, no es lo mismo, pero sí es posible lograr que sea una tarde para recordar. Cuando los abuelos viven en otra ciudad o las agendas de unos u otros no permiten que este año podamos pasar una fecha tan señalada en el calendario todos juntos, no nos queda otra que echar mano de todo nuestro ingenio para acortar distancias y hacer llegar nuestro amor a los mayores y más sabios de la familia.